lunes, 8 de junio de 2009
Terapia Electroconvulsiva (TEC)
Más allá de las controversias, sigue siendo uno de los principales tratamientos disponibles y utilizados en psiquiatría para las enfermedades mentales graves. Muchos pacientes han mejorado o aliviado su enfermedad o, incluso, su trastorno ha remitido con esta terapéutica. Sin embargo también otros muchos afectos de enfermedades mentales resistentes a otros tratamientos no han sido tratados con TEC a pesar de su alto grado de seguridad y predictibilidad. Esta inhibición terapéutica es, todavía, debida a un estigma que parte de creencias acerca de este tratamiento.
La principal indicación de la TEC es la depresión, particularmente en las formas psicóticas o melancólicas, donde esta técnica alcanza mayor efectividad y rapidez que los tratamientos farmacológicos, los cuales, en ocasiones pueden tener mayor número de efectos secundarios y contraindicaciones. Otras formas de depresión donde está indicada son aquélla refractaria a la medicación, la depresión estuporosa, la depresión suicida y la acompañada de rechazo a comer o beber. Así mismo, también se ha considerado eficaz en el tratamiento de la manía y de la esquizofrenia, aunque en estos casos su indicación suele reservarse a pacientes resistentes a la medicación. Estudios prospectivos han mostrado una eficacia similar o superior a la farmacoterapia en la manía, por lo que teniendo en cuenta que más del 30% de estos pacientes responden escasamente a la terapéutica farmacológica, la TEC debe ser considerada como una opción. También debe serlo en mujeres con manía o depresión embarazadas que no pueden tomar fármacos específicos por su estado gestante.
Actualmente se considera que no existen contraindicaciones absolutas para la TEC, aunque sí situaciones de riesgo relativo, de manera que la indicación para el tratamiento debe basarse en una cuidadosa valoración del grado de riesgo o del riesgo sustancial que comporte la intervención y el cociente riesgo/beneficio en función de la enfermedad existente. La situación del paciente (sobre todo la gravedad y duración de su proceso), la amenaza para la vida que represente el trastorno, la respuesta a otras terapias o a TEC previamente, los efectos adversos o contraindicaciones de otros tratamientos y el peligro de la abstención terapéutica determinan el riesgo relativo del paciente. Los pacientes de alto riesgo médico y psiquiátrico son los que precisamente más beneficios suelen recibir de la TEC.
En cuanto a los efectos secundarios, el más destacado es la presencia de un período de confusión inmediatamente posterior a las convulsiones, acompañado de una amnesia anterógrada y retrógrada que permanece durante todo el tratamiento. Las alteraciones neuropsicológicas de La TEC configuran un patrón bien definido. En general, se observa un período variable de desorientación que sigue inmediatamente a las convulsiones. Después del estado confusional, se observa una alteración de la memoria retrógrada y amnesia anterógrada. La desorientación aguda y los defectos mnésicos son sensibles a un conjunto de parámetros de la TEC. Por ejemplo, las TEC unilaterales tienen menos consecuencias que las bilaterales. Otra variable a tener en cuenta en las consecuencias producidas es el número de tratamientos, el espacio entre tratamientos y la intensidad del estímulo. Por lo general, estos síntomas secundarios suelen desaparecer de forma gradual tras la finalización del tratamiento. Concretamente, se ha observado que la normalización de la función cognitiva tras TEC oscila entre 24 horas y 7 días, aunque se han descrito déficits de memorización hasta 6 meses después de la TEC, pudiendo quedar una amnesia permanente que abarca los meses inmediatamente precedentes, inmediatos y posteriores al curso de la TEC.
Otro efecto adverso puede ser la aparición, durante el tratamiento, de cuadros hipomaníacos que requieren un diagnóstico diferencial entre una euforia orgánica y una manía emergente en pacientes con procesos afectivos.
http://www.biopsicologia.net/fichas/page_7345.html
Actitud de la familia ante un miembro bipolar
En la actualidad existen factores que desencadenan y aceleran a temprana edad el trastorno bipolar entre personas.
La pobreza, problemas maritales, estrés, maltrato físico o psicológico, o la baja autoestima son factores que pudieran acelerar la manifestación del trastorno bipolar ya que durante este proceso se consumen drogas, alcohol o algunos medicamentos sin prescripción ocasionando los llamados disturbios bipolares ya que los pacientes pueden pasar más de 8 años sin que les diagnostiquen el trastorno bipolar1 como tal.
Otro factor que dificulta la situación del paciente bipolar es que no encuentra los medicamentos necesarios para su tratamiento.
Es importante para las personas que rodean al paciente bipolar poder identificar conductas que pudieran anteceder a un episodio. Y saber cómo reaccionar ante un episodio de manía o de depresión. Es por eso que en esta investigación se pretende obtener la información necesaria para realizar una guía de acciones o actitudes que la familia y amigos puedan tener con el paciente bipolar para que el mismo pueda sobrellevar su enfermedad.
El apoyo de familiares y amigos en un paciente bipolar, es crucial para la situación del paciente. Consideramos como apoyo de la familia el hecho de que estén consientes de que durante un episodio maníaco o depresivo la actitud que toman o cómo se comportan, no son realmente ellos, sino que es una enfermedad,Punto y seguido. deben tener mucha paciencia, no tratarlos mal, y mientras no estén durante algún periodo de manía o depresión, tratarlos como a cualquier otro miembro de la familia, sin cuidados especiales. De ser posible se deben vigilar todas sus actividades con ayuda de los amigos. Deben mantener su tratamiento, ya que si se suspende se puede empeorar la condición del paciente. Los amigos y familiares del paciente bipolar, pueden promover determinadas conductas para que el paciente pueda sobrellevar mejor el trastorno bipolar2. Algunas de las conductas recomendadas, son las siguientes:
*Brindarle mas atención3 al miembro bipolar.
*Aprenda los signos particulares de cómo la persona actúa cuando se aproxima un episodio maníaco o depresivo.
*Sugerir al paciente que mantenga el tratamiento. *Vigilar que evite el alcohol y las drogas.
*Acompañe al paciente al doctor.
“Los trastornos bipolares son procesos crónicos que alternan ciclos de manía y depresión. La manía se manifiesta como euforia o irritabilidad desproporcionadas, generalmente acompañadas de una confianza poco realista de las capacidades del propio sujeto, aumento del impulso sexual, delirio y consumo de alcohol y otras drogas. Los pacientes con trastorno bipolar pueden también sufrir episodios mixtos caracterizados por la presencia de sintomatología depresiva y maníaca de forma simultánea.” (Medscape. el mundo.es 2001).
El trastorno bipolar, es un trastorno caracterizado por episodios de psicosis y depresión. Entre un episodio y otro suelen haber periodos de normalidad.
El individuo que padece el trastorno bipolar presenta unas manifestaciones extremas de dos estados de ánimo principales: el polo depresivo y el polo maníaco o de euforia.
· Polo depresivo: en éste se manifiestan los síntomas comunes de la depresión, pero de forma intensa y extrema.
· Polo maníaco o eufórico: en este polo se manifiestan los síntomas de un estado anímico anormal o persistente elevado, al punto de que lo lleva a un grado de irritabilidad e intolerancia por parte de quienes lo rodean.
El Centro de Psicología y Terapia Virtual (CEPVI) (2005) clasifica el trastorno bipolar en seis tipos:
- Bipolar 1: se dan episodios maníacos y depresivos.
- Bipolar 2: sufren principalmente de episodios depresivos con episodios ocasionales de hipomanía.
- Ciclotimia: periodos de hipomanía alternando con depresión moderada durante al menos dos años. Es menos severa pero más persistente. Los cambios son frecuentes, dándose cada pocos días o semanas.
- Ciclo rápido: tienen 4 o más episodios al año en cualquier combinación de manía, hipomanía, mixto o depresivo. Se da en el 5-15% de los bipolares. A veces también se dan ciclos ultrarrápidos, con más de 4 episodios a la semana.
- Mixto: síntomas de manía y depresión que ocurren simultáneamente o alternan con rapidez durante el mismo día, es decir, episodios maníacos con estado de ánimo muy triste o irritable.
- Disturbio esquizoafectivo: en el disturbio bipolar, cualquiera de los síntomas psicóticos que ocurren durante episodios severos de manía o depresión terminan cuando el ánimo regresa a lo normal.
Griswold y Pessar (2000) explican que hasta ahora, las causas del trastorno bipolar no se han encontrado. Muchos psicólogos y doctores difieren en cuanto a las causas. Algunos médicos afirman que el trastorno bipolar resulta de alteraciones en las áreas del cerebro que regulan el estado de ánimo.
Ana Muñoz, directora del Centro de Psicología y Terapia Virtual (CEPVI), señala que las causas del trastorno bipolar son múltiples, pueden ser: genéticas, psicológicas, ambientales o emocionales (2003).
Pedro Antón, psiquiatra y director de la Clínica Mediterránea de Neurociencia en Alicante, alertó que el consumo de determinadas sustancias estupefacientes, aunque no son la causa directa, pueden influir como desencadenante de un trastorno de tipo bipolar.
“Las familias de niños y adolescentes afectados casi siempre están desconcertadas por la enfermedad de comienzo temprano y sienten desesperadamente la necesidad de información y de apoyo.” (César Soutullo 2000)
“La familia de los bipolares juega un papel muy importante pues éstos deben recordar al enfermo la toma de la medicación, reconocer las señas del suicidio, no deben protegerles con exceso y deben saber perdonar muchas cosas realizadas en la fase eufórica.” (Antón, Pedro 2005)
El tratamiento para una persona bipolar consiste en medicación, educación y psicoterapia.
Los dos tipos de medicamentos más utilizados para controlar los síntomas del trastorno bipolar son estabilizadores de ánimo y antidepresivos.
Los estabilizadores de ánimo son usados para mejorar síntomas durante episodios agudos maníacos, hipomaníacos y mixtos, a veces pueden reducir síntomas de depresión. Una vez que el paciente tenga los medicamentos adecuados y el tratamiento necesario, el paciente puede llevar una vida normal sin ningún tipo de impedimentos ni complicaciones.
“El litio, es el apoyo principal del tratamiento para el desorden bipolar. El ácido Valproic es una alternativa en los pacientes que no pueden tolerar el litio o responden mal a el. Los antidepresivos pueden ser necesarios para tratar la depresión severa de la brecha pero se deben evitar durante la terapia del mantenimiento porque pueden accionar un episodio maníaco.” (Becky Lien Munson. Nursing Horsham: 2004).
“Se puede usar terapia electroconvulsiva para tratar el trastorno bipolar. Dicha terapia es un tratamiento psiquiátrico que utiliza una corriente eléctrica para causar una breve convulsión del sistema nervioso central mientras el paciente se encuentra bajo el efecto de la anestesia. Los estudios han encontrado en forma repetitiva que la terapia electroconvulsiva es el tratamiento más efectivo para la depresión que no se alivia con el uso de medicamentos.”( Dilley W. James, 2004).
La psicoterapia es de gran importancia ya que cuando se produce un episodio, la vida del paciente y de su familia puede quedar completamente dislocada. Lo mas importante del tratamiento psicológico, es enseñar al paciente a detectar los primeros signos y enseñarle técnicas que pueda utilizar para controlarlos.
La educación es crucial en la ayuda a los pacientes y familiares para aprender cómo manejar mejor el trastorno bipolar y prevenir sus complicaciones.
Sergio Villaseñor (Cit. Pos. López 2005) señala que el desorden bipolar es una enfermedad psiquiátrica común que afecta a cerca de 1.5 a 2 millones de mexicanos en la actualidad.
“De no tratarse el trastorno bipolar, la persona puede presentar un marcado deterioro en sus funciones personales, familiares, sociales y ocupacionales.” (Brenda Matos,2004) Apellido del autor, año y página.
Referencias:
American Psychiatric Association.(1994). Diagnostic and Stadistical Statistical Manual of Mental Disorders (4ª ed.). Washington, DC. EE. UU
Antón, Pedro (2005) El Consumo de Drogas Desencadena la Bipolaridad [en red] disponible en: http://www.estilisimo.com/adolescentes/reportaje_adolescentes.html?id_reportaje=2024
Cuatro genes pueden estar detrás del desorden bipolarDonalee Moulton. Medical Post Toronto:May 20, 2003. Vol. 39, Iss. 20, p. 48
Dilley W. James (septiembre, 2004) Trastorno Bipolar [en red] disponible en: http://www.nlm.nih.gov/medlineplus/spanish/ency/article/000926.htm#Tratamiento
Dirección del desorden bipolarKim S Griswold, Linda F Pessar. American Family Physician Kansas City:Sep 15, 2000. Vol. 62, Iss. 6, p. 1343-1353
López, Tomas. Interesante exposición de artistas bipolares y esquizofrénicos en el Mutec [en red] disponible en: http://www.elsoldemexico.com.mx/impreso/050113/sociedad/4sociedad.asp
Matos, Brenda (2004). Bipolaridad [en red] disponible en: http://archivo.elnuevodiario.com.ni/2004/enero/01-enero-2004/sexualidad/sexualidad6.html
Medsacpe.elmundo.es(2001) La Olanzapina Puede Conseguir un Mejor Control de los Trastornos Bipolares [en red] disponible en: http://elmundosalud.elmundo.es/medscape/2001/10/19/portada_noticias/1003522317.html
Muñoz, Ana (2005). El Trastorno Bipolar [en red] disponible en: http://www.cepvi.com/articulos/bipolar.shtml
MYTHS & FACTS Becky Lien Munson. Nursing Horsham:Jan 2004. Vol. 34, Iss. 1, p. 31
Soutullo, César (2000) Estudio Sobre la Bipolaridad en Edades Tempranas [en red] disponible en: http://www.bipolarweb.com/menores.htm